La nueva deprimente actuación de
los cuadros nacionales – esta vez fueron Melgar, Sport Huancayo, Inti Gas y
Juan Aurich– en la Copa Sudamericana, eliminados en primera fase con goleadas y
sólo un partido ganado de ocho disputados, vuelve a poner sobre el tapete la
urgencia de replanteos en el sistema de clasificaciones a torneos
continentales.
Por tanto, insisto, ¿merece un
campeonato mediocre en juego y organización (que hasta el propio Markarián en
charla dada hace tres semanas en la Universidad San Pedro de Trujillo, reconoció)
entregar siete cupos a certámenes continentales? Peor aún, ¿acaso es equitativo
que hasta casi la mitad de equipos competidores (7 de 16) sean ‘’premiados’’
con jugar Copa Libertadores o Sudamericana? En ligas como la brasileña donde participan más de 40
clubes, la argentina con 20 o hasta la uruguaya y colombiana ese número de vacantes y
hasta más es aceptable pues, también, sus competencias son de mayor calidad y
en el plano internacional cumplen papeles muy honrosos.
Pero en el caso de la peruana,
donde ni siquiera las programaciones (con cotejos organizados a las 11 a.m. en
día viernes o miércoles) son sensatas, es evidente que, lejos de promover mejoras,
retrasa, e impulsa pésimas imágenes año tras año, salvo actuaciones tan eventuales
como la de Cienciano el 2003.
Por consiguiente, bien haría, la
propia ADFP, en solicitar a la Conmebol que postergue sus afanes económicos y se
recorte los puestos para Perú o, en todo caso, como declaró el propio arquero
de Melgar, Leao Butrón, se reordene el procedimiento de clasificaciones.
Hasta la próxima.
Oswaldo Rivasplata
o.rivasplata@pucp.edu.pe